El estudio empírico

Estudio basado en datos del satélite Terra de la NASA apoya la tesis de un efecto protector de los invernaderos de Almería contra los efectos del calentamiento global. El efecto de enfriamiento del clima almeriense por cambio de uso del suelo para invernaderos es 12 veces más intenso al del calentamiento global causado por el aumento de CO2.

 

El estudio

 

Este trabajo de investigación ha sido dirigido durante el pasado año 2007 por el Profesor de la Escuela Politécnica Superior Dr. Pablo Campra Madrid. Ha sido publicado el 23 de septiembre de 2008 en la prestigiosa revista Journal of Geophysical Research, editada por la American Geophysical Union, bajo el título “Tendencia al enfriamiento superficial y forzamiento radiativo negativo debido al cambio de uso del suelo hacia la agricultura de invernadero en el sureste de España”

 

Todo comenzó al investigar el impacto del cambio climático sobre la agricultura intensiva almeriense. Los científicos han descubierto que, de momento, está ocurriendo más bien lo contrario: los invernaderos modifican el clima de la comarca.

 

La idea surgió tras considerar el efecto contrario al calentamiento atmosférico ocasionado por los hielos polares al reflejar gran parte de la radiación solar que reciben, efecto denominado como “albedo”.  ¿Cuál sería el efecto similar sobre el clima almeriense originado por las 30.000 hectáreas de invernadero, única actividad humana visible desde el espacio precisamente por la elevada cantidad de energía solar que devuelve el “mar de plástico”? 

 

El estudio consta de dos partes. En la primera estudia la evolución en las últimas décadas  de las temperaturas medias anuales de tres estaciones meteorológicas provinciales: aeropuerto de Almería (INM) y dos del Campo de Dalias: la Mojonera (IFAPA) y Las Palmerillas (CAJAMAR). Seguidamente se comparan estos datos con estaciones del INM usadas como controles, esto es, lejos de la influencia directa de los invernaderos almerienses. Para ello se eligieron las estaciones del INM en los Aeropuertos de Málaga, Granada y Murcia-San Javier.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Pues bien, en todos los observatorios control se confirma el efecto del calentamiento global en el sur de España a partir de 1972 (en tasas elevadas de unos +0.5 ºC por década desde 1984), mientras que en el observatorio del aeropuerto de Almería la temperatura no ha subido desde 1989 e incluso presenta un leve descenso en la actualidad. Pero lo más sorprendente es la tendencia opuesta detectada en los 2 observatorios del Campo de Dalias: una tasa de enfriamiento de -0.3 ºC por década.

 

La segunda parte del estudio trata de demostrar la hipótesis de que la causa de este enfriamiento está en el reflejo de parte de la luz solar al espacio (efecto albedo) por la cubierta de los invernaderos. La energía devuelta al espacio no puede entonces calentar la superficie terrestre como lo haría de no existir la agricultura intensiva en la comarca.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En este estudio se ha calculado el efecto del cambio de uso del suelo sobre el clima desde el estado de erial a pastos y agricultura de subsistencia anterior al desarrollo de los invernaderos hasta el uso intensivo actual. Este efecto sobre el clima de las actividades humanas se denomina “forzamiento radiativo”. Un forzamiento positivo causa un calentamiento del clima mientras que un forzamiento negativo enfría la temperatura de la atmósfera.

 

En este caso, el forzamiento sobre el clima se mide como la diferencia entre la radiación solar reflejada al espacio por dos usos del suelo diferentes. Tras el aumento en los gases invernadero, el cambio de uso del suelo es el mayor impacto humano sobre el clima del planeta. En el caso almeriense este impacto resultó ser de enfriamiento.

 

El forzamiento sobre el clima causado por el desarrollo de los invernaderos se ha estimado en un valor medio anual de -20 W/m2, con intensidad máxima en verano de -35 W/m2, valores negativos y por causantes del descenso de temperaturas.

 

El forzamiento de -20 W/m2 producido por los invernaderos sobre el clima de la comarca es 12 veces más intenso y opuesto al famoso efecto del aumento global de CO2 causante del cambio climático, estimado en +1,66 W/m2 por el ultimo informe del Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC) y de magnitud comparable al efecto protector neto de las nubes a escala planetaria, estimado también aproximadamente en unos -20 W/m2 de media anual.

 

Se concluye que el vertiginoso desarrollo de los invernaderos en las últimas décadas es la causa más probable de la ausencia de calentamiento del clima del sur de la provincia de Almería, a diferencia del clima del sur de España y del hemisferio norte, estimado en una tasa de +0.24ºC por década durante los últimos 25 años.

 

A este efecto protector del albedo o reflejo debe sumarse el de la elevada captación de CO2 por los cultivos agrícolas almerienses, estimado por estos investigadores según sus investigaciones en curso en unas 10 toneladas de CO2 por hectárea: la emisión anual de 4 automóviles.

 

 

 

INVESTIGACIÓN:

INVERNADEROS Y CAMBIO CLIMÁTICO

Campra, P., M. Garcia, Y. Canton, and A. Palacios-Orueta (2008), Surface temperature cooling trends and negative radiative forcing due to land use change toward greenhouse farming in southeastern Spain, J. Geophys. Res., 113, D18109, doi:10.1029/2008JD009912.