PRÓLOGO (1-63) Dioniso.- Lo recita Dioniso, que anuncia su propósito de castigar ejemplarmente a Penteo y a su familia por haber despreciado su divinidad. Para ello ya ha sacado de sus hogares a las mujeres de Tebas, llevándolas en báquico delirio al Citerón. Luego el dios invita al coro de bacantes, que le siguen en su peregrinar desde tierras de Asia, a entrar en escena.